Bienvenido al país que
no tiene bandera ni sale en los mapas.
Un país al que no llegan los turistas.
Un país al que no llegan los turistas.
Para vivir allí, sólo tienes que haberlo perdido todo.
Bienvenido al país de los refugiados.
PARA ENAMORADOS DE LA BIOÉTICA Y PARA LOS QUE QUIERAN ENAMORARSE DE ELLA. Pasa, estás en tu casa.